Tras la virtual ruptura que implica el lanzamiento de Movimiento al Futuro, el nuevo espacio político impulsado por el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, la presidenta del Partido Justicialista (PJ) a nivel nacional, Cristina Fernández de Kirchner, busca tomar la iniciativa política en las provincias. El pasado viernes había hecho lo propio con dirigentes de la provincia de Misiones.
La expresidente participó este miércoles en el Instituto Patria de un encuentro con dirigentes jujeños del peronismo y de otras fuerzas políticas. Lo calificó de «excelente». Estuvieron presentes diputados nacionales, provinciales, intendentes, concejales y dirigentes gremiales. Incluso entre los presentes estuvo el exministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández.
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«Todos ellos expusieron durante más de dos horas sobre cuál es la situación de la provincia en materia económica, sanitaria y social. En particular abordaron el caso de los más de 180 despidos del ingenio Ledesma que, además, no serían los únicos», expresó la expresidenta de la Nación en sus redes sociales. Para Cristina Kirchner, este es «un escenario complejo» que a partir de las decisiones que lleva adelante el gobierno de Javier Milei, «tiende a profundizarse a lo largo y a lo ancho del país».
Las declaraciones tienen lugar luego de que el Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma (SOEAIL) denunciara que la empresa despidió «sin causa» a 40 trabajadores, mientras que dejó inconclusa la continuidad de otros 165 puestos de trabajo.
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A comienzos de semana, el gremio convocó a una asamblea en la que se definirá un “plan de lucha” para el sindicato. Las autoridades de la empresa —que emplea a unos 6.000 trabajadores—, intentan «condicionar las negociaciones paritarias 2025, produciendo los despidos como respuesta inmediata» al pedido de reajuste salarial, dijeron fuentes de SOEAIL.
Despidos en las dos principales fuentes de empleo
En el municipio de Libertador General San Martín, departamento jujueño de Ledesma, las dos principales fuentes de empleo son el ingenio y el Estado Nacional. “Ayer lloraba la gente de El Talar, porque saben que deben irse de su pueblo a otro lado”, dijo el secretario general SOEAIL, Luciano Lezano.
En el Estado Nacional, por su parte, en 2024 se produjeron cerca de 36 mil despidos, mientras que en 2025 la política de reducción de la cantidad de trabajadores estatales continúa a paso firme.
El dirigente azucarero explicó que Ledesma comunicó al sindicato sobre los despidos en una reunión. Días antes había citado a cada trabajador invitándoles a aceptar un retiro voluntario con una indemnización. Ante la negativa encontrada entre los trabajadores, activó los despidos.
Actualmente, el salario promedio de un trabajador de Ledesma es de $800 mil de bolsillo, con turnos rotativos de 8 horas. La mitad de sus sueldos es no remunerativo ni bonificable. La compañía cuenta con una planta de seis mil trabajadores.
Lezano dijo además que en la reunión que mantuvo con los ejecutivos de Ledesma le dijeron que les salía “más caro un trabajador que el producto”, aduciendo un incremento sostenido de los costos de operación y una disminución de los precios al consumidor.
FPT